Mientras tú me ignoras
Ella tal vez estaba triste, pero tonta no era. Ni tenía tiempo para perder. A veces lo que se extraña son los momentos de tranquilidad, cotidianidad y rutina, y la familiaridad de compartirlos con gente que calce en tal cuadro. "Sabes que no, me gusta otra chica", así se neutraliza una expectativa. Rápido y efectivo. Como se neutraliza a un rival, una amenaza potencial o a los guardias de los lugares que guardaban esas cosas brillantes y bonitas que le gustaba "robar? robar lo hacen los ricos. yo me las estoy devolviendo". Así lo hizo el sujeto de su momentáneo afecto, y aunque le dolió lo que duele un rechazo, ella no tardó en reconocer que le hizo un favor. Ya habrán otras mujeres en su vida, pero leyenda, sólo una.