La Reliquia
...esta lo es en verdak. La escribí el propio día de mi cumpleaños número 25, en circunstancias internas poco agradables. Me ratifico en ese sentido de "alegre justicia": mirarme desde mi ahora hacia mi ayer y poder decir, sin empacho y cuando hay que decirlo, "_uta que brutto!". Sin embargo, percibo que hay bastante de verdad en cuanto relato escribo. Qué miedito... XDD
Me doy paso:
..Y ahora, me encuentro un mundo de sombras y locura, donde en lo último que piensan sus habitantes es en por qué dejan que gobiernen los que no caminan de manos.
Quisiera no tener ojos para no haber visto la razón que me trajo hasta aquí. ¿Que si las drogas hacen daño? Más bien se asemejan a un paquete de explosivos para dinamitar tu propia caja de Pandora. Ahora, así atado, se me ha hecho preferir drogas para implotar tales ideas... y todo a su alrededor.
Mi mundo se derrumba... mi mundo se redibuja ante mis sentidos a cada momento. El y todas las cosas que lo que lo compone se mantienen entramados en una especie de danza ritual cuyo clímax es aparecer ante mis ojos... estáticos, inánimes, orquestando la pantomima de que soy yo quien las hace y deshace. Más allá de éstas hay abismos de nada, sus sucesiones están hiladas por finísimas fibras de nada, ellos mismos están compuestos por incontables, minúsculas y hasta el hartazgo divisibles y nominables partículas de nada; sostienen entre risas y bromas de singular sutileza el teatro de nuestra continuidad temporal y ocultan en los momentos que nuestra lentitud sensorial no percibe su propia muerte.
¿Para qué, entonces, saber e investigar tanto sobre ellos? Ese es un asunto de monos científicos, compulsivos y entrenados para contar. Pronto moriré... aún la muerte ha perdido su esencia, sumido como estoy en este interminable océano de imágenes y sensaciones que nunca más transcurrirán de manera continua ante y a través de mí, y que me duelen a cada instante. Todo lo que ingerí a mis escasos 16 años ha abierto la puerta y ahora el viento se está llevando la casa... Oh, Jim, qué homínido de ciencia no daría su vida por medir un segundo de lo que hemos vivido, en lo cual tienes la suerte de ser menos volátil y menos vehemente que yo... no sé cuántos años más dure tu aventura, ni qué tan lejos llegues después de ti mismo en ella. Sólo sé que debo partir al estado al que debería ser penado por ley acceder por otra vía que no sea la de Oriente.
Muero otra vez como tantas, y como tantas otras, de la forma más angustiante que pueda permitirme, así atado y conciente: le niego al aire la entrada a mí. Llevo días en este empeño, discreto pero constante, de modo que quienes se empeñan en mantenerme vivo no lo noten. Sé que estoy a punto de conseguirlo cuando noto que he olvidado todo excepto que recordaré todo esto cuando vuelva.
Adiós, Jim querido. Hasta pronto. No olvides dejar una señal para reconocerte cuando vuelva.
He expirado el 19 de junio de 1960, a la edad exacta de 16 años.
Notas:
Presento la versión corregida y aumentada del relato que escribí a la fecha que he señalado, y que me valió ser atiborrada mi cajita de comentarios de letras de reguetón cristiano por encontrarlo al mismo de contenido altamente perjudicial para el virginal ojo reguetonero cristiano (es que se puede poner "virginal" y "reguetonero" en la misma frase???), y posteriormente, cerrado mi blog.
The Doors no figura entre mis bandas favoritas, para quien sospechó del personaje.
Este es un recuerdo que obtuve sin hacerme ninguna regresión.
Recordar ayuda a no pasar por lo mismo, a mejorar. Ténganlo encuenta cuando ya les toque morirse. =D
Comentarios
QUE BUENA FRASEEEEEEE
Oe... No cierres el blog...
Oe... No te mueras todavía ;)
Jim es mi papá :P